El pasado 2 de octubre se desarrolló la primera vuelta presidencial en Brasil. Si bien fueron 11 los candidatos que participaron en esta elección, dos eran claros favoritos, el candidato por el Partido de los Trabajadores y ex Presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, y el actual Presidente y candidato del Partido Liberal, Jair Bolsonaro. No obstante, contrario a algunos pronósticos que planteaban una eventual victoria del primero en esta instancia, el estrecho margen entre ambos candidatos finalmente determinó que el futuro gobernante de Brasil se defina en una segunda vuelta que se realizará este domingo 30 de octubre.
Por décadas, Brasil se ha posicionado como actor clave dentro de Sudamérica y el mundo. Sin embargo, en el ultimo tiempo, distintas políticas lo han aislado del resto de países del bloque sur, incluyendo a Chile.
Lorena Oyarzún, Doctora en Relaciones Internacionales y profesora de la Facultad de Gobierno de la U. de Chile, sostiene que un eventual triunfo de Bolsonaro aumentaría la distancia con los países del bloque sur, incluyendo a Chile.
«El escenario para un giro como tal hacia la izquierda va a ser difícil de desarrollar por Lula», plantea Paz Milet, académica del Instituto de Estudios Internacionales de la U. de Chile
Paz Milet, académica del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile, plantea que este proceso demuestra el incierto escenario político que vive el país más grande de Sudamérica en la actualidad. “Hay una incertidumbre respecto a que pueda ocurrir en Brasil (…) En general, no hemos podido reconocer cómo van a ser los tránsitos políticos en la región. Se han dado bastantes sorpresas en el último tiempo, por ejemplo, lo que ocurre con Lasso en Ecuador”, señala.
Por otra parte, Lorena Oyarzún, Doctora en Relaciones Internacionales y profesora de la Facultad de Gobierno de la Universidad de Chile, destaca el giro agresivo que se ha percibido en los últimos debates presidenciales. “Es una elección que ha sido muy polarizante en términos de visión de mundo”, comenta. Esta marcada oposición de ambas tendencias políticas, agrega, no da cuenta de la diversidad que hay en el país. “No integra, así como que se ha dado en otras elecciones, por ejemplo en Chile, donde hay candidatos que están un poco fuera, con candidatos que se denominan outsider, o que son más jóvenes, o que presentan mujeres o alguna diversidad”, indica Oyarzun.
Esta misma polarización dificultaría, asimismo, un eventual nuevo gobierno de Lula, ya que actualmente el parlamento es controlado por partidos afines a Bolsonaro, explica la profesora Milet. “Sin duda, el escenario para un giro como tal hacia la izquierda va a ser difícil de desarrollar por Lula”, advierte la académica, un contexto que podría inclinar la balanza a favor de Bolsonaro.
Los efectos de las elecciones en Chile
En relación a la política exterior, ambas especialistas afirman que el resultado de las elecciones en Brasil serán determinantes para toda la región, dado su liderazgo histórico en el continente. Sin embargo, la profesora Oyarzún comenta que esta hegemonía ha entrado en decadencia en el último tiempo. “Brasil dejó de ser líder no solamente en la región, sino que a nivel global. Ya con los últimos gobiernos del Partido de los Trabajadores, particularmente con Lula Da Silva, veíamos que Brasil era un gigante en el área regional y además internacional (…) En el caso de Bolsonaro, estuvo mucho más alineado con Donald Trump y después de que él no estuvo, se retrae un poco más”, señala.
Ante este escenario, un eventual triunfo de Bolsonaro aumentaría la distancia con los países del bloque sur, incluyendo a Chile. Ejemplo de este distanciamiento ha sido cómo el embajador en Brasil nombrado por el gobierno del Presidente Boric, Sebastián de Polo, sigue sin ser ratificado por el gobierno brasileño, a más de 200 días de su nombramiento. “Hasta el momento, sabemos que el gobierno del presidente Boric mantiene ese nombre y se está esperando a ver qué es lo que pasa en las elecciones”, indica Oyarzun.
Milet advierte, sin embargo, que un triunfo de Lula tampoco significaría una notable mejoría de la política exterior con Brasil, por lo que llama a acotar las expectativas. La razón, explica, es que el escenario que enfrentaría el ex mandatario no es tan favorable como el que tuvo en su primera etapa. “El precio de las materias primas ya no está tan alto y tenemos una región muy fragmentada. Entonces, sin duda, esperar una nueva marea rosa a partir de la llegada de Lula al poder, me parece que es generar excesivas expectativas”, sostiene.
Por el momento, la atención está puesta en este 30 de octubre, donde 156 millones de brasileñas y brasileños deberán acudir a los locales de votación para elegir al próximo Presidente de Brasil, elección que se convertirá en el proceso con mayor cantidad de votantes en dicho país. Con Información de la U de Chile– #SNNV – #26Oct #VenprensaInforma
Venezolana de Prensa
12 Años Escribiendo La Historia, No La Cambiamos
Síguenos en: INSTAGRAM: @Venprensa – YouTube – FACEBOOK: Venezolana de Prensa – TWITTER: @Venprensa Tiktok @Venprensa Venprensa.com